Damián Moroni

Luego de hacer un paso fugaz por distintas escuelas de arte, comencé a pintar de forma autodidacta en plena dictadura militar, buscando a través de la expresión artística algún tipo de libertad individual. En ese entonces intentaba hacer que quien viera mí obra no diera cuenta de que trataba, instando así a una especie de juego entre el pintor y el espectador. Es por eso que mis primeros trabajos carecían de títulos. En otras obras trataba de hacer visible lo invisible por medio de algunos personajes imaginarios, casuales y esporádicos. Después de varios años comencé a trabajar en escultura e incursioné con distintos materiales como hierro, madera, mármol etc. Más tarde concurrí a diversos talleres y clínicas de pintura. Luego de todo ese recorrido, hoy mí motor sigue siendo el mismo que el de mis inicios, trato de expresarme libremente sin intentar transmitir nada en especial y así permitir que la gente se deje atravesar y movilizar por la obra con total libertad.